TIJUANA, B.C.- Sin interdiálogo: de lo figurativo a lo abstracto exposición con la que Roberto Rosique, artista plástico y promotor cultural, celebra 40 años de trayectoria artística fue inaugurada el pasado viernes, en la Sala 3 de El Cubo del Centro Cultural Tijuana.
“Lo que presento ahora para Tijuana es un trabajo reciente en el que propongo lo figurativo y lo abstracto, regla poco común en exposiciones, ese es un reto, finalmente es la producción que emerge de ciertos momentos de mi vida, van a sorprenderse de la capacidad organizativa y museográfica que tiene el CECUT”, expresó el artista en la ceremonia inaugural.
“Hago un esfuerzo porque lo que hago tenga sentido, sobre todo lo que uno persigue es mover conciencias, provocar reflexiones, y se logra y te conmueve, entonces cumples con lo que buscas, este es un ejercicio de mis años más recientes, y lo concreto en mi casa, el CECUT; los museógrafos han conseguido darle a mi trabajo el efecto teatral que requiere”, dijo Rosique en entrevista.
“Rompo con la idea de la abstracción convencional para adentrarme en la visión de la Frontera, voy a trasgredir esos límites y hablar de la post abstracción, no puedo hacerme a un lado de mi contexto, espero que eso refleje mi trabajo”, refirió sobre las 60 piezas que integran la exhibición.
“La obra del maestro Rosique debe ser contemplada desde muy diversas ópticas, sus dimensiones abarcan no solo el terreno de lo estético sino también el de la investigación, y lo netamente trascendental, en un periodo de cuatro décadas se ha destacado, además de su profesión como médico oftalmólogo, como artista plástico, investigador, escritor, curador, docente y gestor cultural”, dijo en la inauguración Pedro Ochoa director general del CECUT.
“Es muy difícil encontrar personalidades poliédricas como las del maestro Rosique, además de poseer una solida formación académica en las universidades de Veracruz, Puebla, Baja California y algunas del extranjero, ha sido fundador de la Facultada de Artes de la UABC, y como parte de la actual generación de artistas plásticos, cuya participación esta signada por una fuerte personalidad estética”, afirmó Ochoa Palacio al inaugurar la muestra.
En esta muestra, Rosique rompe con las reglas establecidas, pues generalmente resulta inconcebible mezclar la abstracción con la figuración, “mi cuestionamiento es por qué no transgredirlas, si yo produzco estas dos formas y son las que voy a mostrar”.
Entre las 60 piezas también hay esculturas tridimensionales no convencionales, “son trabajos en madera a manera de estelas y de esos grandes documentos que se usaban en el pasado para transmitir los conocimientos, haciendo alusión a lo fronterizo”.
Esta es la cuarta ocasión que la obra de Rosique llega al CECUT, luego de que en 1989 presentó en este recinto su primera exposición Emigrarte, a la que siguieron las muestras Entre la necesidad y el escarnio, que hablaba de los indocumentados y que ha sido la más exitosa pues circuló por todo el mundo, y Rojo, integrada por objetos históricos pintados en dicho tono con esmalte.
Sin interdiálogo: de lo figurativo a lo abstracto puede ser visitada en horario de martes a domingo de 10:00 a 19:00 horas; (de martes a sábado, los últimos boletos se venden en taquilla a las 18:30 horas; los domingos cuando la entrada es libre, queda a criterio del visitante ingresar después de las 18:30 horas). Los costos de entrada son de $48.00 m.n., general; $27.00 m.n., niños de hasta 11 años; $29.00 m.n., maestros, estudiantes, INAPAM, convenidos con credencial vigente y tarjeta Sé Turista en Baja California; así como $7.00 m.n., para militares, policías y bomberos con credencial y sus familias.